¿A quién beneficia, y en qué grado, la Arqueología Preventiva en Colombia? Resultado de un sondeo de opinión

Mediante la normatividad existente, en particular la Ley 397 de 1997, la Ley 1185 de 2008, el Decreto 833 de 2002 y el Decreto 763 de 2009, se ha hecho obligatorio el desarrollo de Programas de Arqueología Preventiva en el contexto de todos los proyectos de infraestructura que requieran Licencias Ambientales o permisos equivalentes. Según el ICANH, la Arqueología Preventiva tiene como objetivo “mejorar el conocimiento sobre la distribución en Colombia de los diversos tipos de yacimientos arqueológicos para poder evitar efectos dañinos de las obras de construcción y posibilitar la protección de la información y la conservación de los bienes culturales”. 

Teniendo el cuenta el enunciado de los objetivos de la “política estatal en relación con el patrimonio arqueológico” (art.5 Dec.833 de 2002) que busca “la protección, la conservación, la rehabilitación  divulgación y recuperación de dicho patrimonio con el propósito de que éste sirva de testimonio de la identidad  cultural nacional”, y que la gestión del patrimonio cultural implica la participación de múltiples actores y sectores, implementamos un breve sondeo de opinión en torno a la pregunta ¿a quién considera usted que beneficia, y en qué grado, la arqueología preventiva en Colombia?

Mediante el uso de la herramienta de formularios de Google se convocó durante el 1 y el 8 de junio de 2017 (por redes sociales y correos electrónicos) y se contó con 56 participantes a quienes se pidió calificar de 1 a 5 el grado de beneficio que consideraban que, hoy día, deja la práctica de la arqueología para los diferentes actores que participan en la gestión de este patrimonio. 

A continuación los resultados en orden descendente:

¿A quién beneficia, y en qué grado, la Arqueología Preventiva en Colombia?

Primer (1) lugar:  A los arqueólogos y profesionales afines (factor de beneficio positivo percibido: 84.8%)

Segundo (2) lugar:  Al Instituto Colombiano de Antropología e Historia ICANH (factor de beneficio positivo percibido: 69.6%)

Tercer (3) lugar:  A la comunidad académica (factor de beneficio positivo percibido: 46.3%)

Cuarto (4) lugar:  A las empresas obligadas (factor de beneficio positivo percibido: 41.7%)

Quinto (5) lugar:  A los entes territoriales (Gobernaciones, Alcaldías, Resguardos, etc.) (factor de beneficio positivo percibido: 40.9%)

Sexto (6, último) lugar:  A las comunidades locales (factor de beneficio positivo percibido: 25.4%)

Dejamos a consideración de los lectores estos resultados, los cuales agradeceríamos que analizaran o comentaran en el apartado “introduce tus comentarios” abajo de esta entrada.

Att.

Diego Martínez Celis

Blog Rupestrerías

Bogotá, junio 8 de 2017